LA FIGURA DEL MEDIADOR DE CONFLICTOS

En muchas ocasiones, en las empresas suceden situaciones de conflicto entre empresarios y trabajadores, que necesitan resolverse de manera directa y personal.

Justo en el momento que atravesamos,  y ya desde hace unos años,  se han producido numerosos conflictos por la misma situación hostil de nuestra economía, despidos, ERES, problemas sindicales, etc.

Todas estas situaciones conflictivas, no necesariamente se han de resolver en un juzgado, aumentando el tiempo de resolución del mismo y alargando la espera y el problema. Existe la posibilidad de utilizar la intervención de un mediador laboral¸ reportando numerosos beneficios, como son:

Rapidez.

  • Proximidad entre las partes.
  • Flexibilidad
  • Tener el control sobre el proceso.
  • Soluciones orientadas a los intereses de las partes.
  • Los acuerdos serán de carácter privado.
  • Máxima confidencialidad.
  • Tratamiento de carácter personal.

El mediador es una figura que no toma decisiones por las partes, sino que escucha, pregunta, sondea, y a veces provoca y confronta, para ayudar a las partes. Provoca la generación de un proceso de comunicación y negociación que permitirá a las partes analizar profundamente el problema, generar soluciones y acordar una serie de pasos a seguir para llegar a una solución.

Así pues, es importante que el mediador tenga nociones de cómo desarrollar este proceso y que sea alguien que inspire confianza a las partes Ha de mantenerse imparcial hacia las partes, y mantener el compromiso de servir a ambas.

En ningún momento resolverá el problema, sino que hará llegar a las partes a un acuerdo propuesto por las mismas, con el fin de resolver el conflicto sin tener que llegar al juzgado y ralentizar el proceso.

Si está interesado en usar la figura del mediador, consulte con este despacho.

Consúltanos tus dudas